Guatemala, 18 de noviembre de 2025
En el marco del Día Internacional del Hombre, que se conmemora cada 19 de noviembre, las investigaciones en neurociencia e inteligencia emocional confirman un fenómeno históricamente invisibilizado: la tendencia de muchos hombres a silenciar sus emociones y recurrir al consumo compensativo como estrategia para manejar el estrés, la presión social y las exigencias del rol masculino tradicional.
En ese contexto, el Instituto Nacional de Administración Pública (INAP) desarrolló la charla Hombres 360, impartida por la licenciada Aransasú Aguilar, experta en bienestar integral, quien explicó que muchos hombres viven con una sensibilidad escondida, aprendida para no mostrarse vulnerables; por ello, “darse el permiso de sentir es un paso urgente para su salud mental”.
El enfoque de Hombres 360, impulsado por profesionales como Aguilar, propone integrar mente, emoción y propósito para reconstruir una masculinidad más saludable, donde la idea central es reconocer un mundo emocional sin culpas ni estigmas. “El bienestar masculino hoy exige un cambio profundo: dejar de pensar que sentir es una debilidad”, enfatizó la conferencista, y agregó “la neurociencia lo confirma: las emociones no desaparecen, solo se esconden… y el cuerpo termina hablando por ellas”.
Esto deriva en lo que se conoce como emociones en pausa, un patrón que complica la identificación y expresión de sentimientos como tristeza, miedo o ansiedad, y frente a esta desconexión emocional, el consumo compensativo, como compras impulsivas, alcohol, comida en exceso o escapes digitales, funciona como una vía rápida para aliviar tensiones, aunque solo de forma temporal.
Para la Dirección de Recursos Humanos, del INAP, la fecha sirve como recordatorio para abrir conversaciones necesarias y se convierte en una invitación para comprender las diferentes masculinidades en el siglo XXI.